La nueva colección de bolsos de Charo García viene cargada de contrastes, o lo que es lo mismo, variedad, para facilitarte qué ponerte, cómo ponértelo y cuándo ponértelo sin ningún problema. Lo mejor de algunos de sus nuevos diseños radica en su versatilidad, en esa capacidad de adaptarse a diferentes momentos del día, con estilismos que igual que pueden encuadrarse para un ritmo urbano, lo hacen para el que marcan las invitadas de boda. Para mostraros parte de sus nuevos bolsos os propongo cómo combinar shopping y bowling de Charo García.
Así, con dos de sus bolsos, un camel y un étnico, he querido dar vida a dos estilismos que, a priori, difieren de lo que podría ser obvio. El bolso grande siempre va asociado con comodidad, por lo que solemos mezclarlos con prendas casual. Y el textil de estampado geométrico, dado que es azul, la primera opción sería combinarlo con jeans, camisa blanca y calzado plano.
Pero éstas serían eso, primeras opciones. Y yo pues me he metido un poco en dirección contraria. Así, para un primer estilismo, el del bolso shopping, en vez de casual lo he enfocado a un look de oficina o inclusive para algún que otro compromiso de esos que se tercian con amigos, tipo almuerzo o refresco a la salida del trabajo.
Para el segundo, sí, he recurrido al tejido vaquero pero en un abrigo, no la alternativa pantalón multibolsillos. Y, al igual que con el otro, lo he orientado a un estilismo más elegante, no el que cabría esperar en tono algo más desenfadado y práctico.
Falda lápiz y satén para shopping de Charo García
Mezclar una falda lápiz y satén para un shopping de Charo García ha sido más fácil de lo que pueda parecer gracias a la firma Lago Rosa que trabaja el wax, esos tejidos africanos con un especial aspecto y tacto que, aunque puedan resultar algo rudos, consiguen dar exotismo a cualquier combinación que se te plantee. La diversidad de estampados y tonos, la fuerza del color que emplean y el que sean tejidos con cuerpo, ayudan a darle ese toque único que poseen piezas como las suyas.
La alegría de sus estampados, ésos que sólo las africanas saben llevar y combinar de forma atrevida, ha sido la pieza clave para que bolso, gafas de sol y complementos hayan combinado en equilibrio, pues es la prenda que une a todo el puzzle. Yo he sido comedida y me ha faltado valentía para conjuntar con otro estampado, por lo que he apostado a lo seguro y he conjuntado la falda con un cuerpo de manga francesa en satén y tono morado, el principal tono de la misma.
Con esta prenda le añado glamour, ese toque sofisticado que propugna el que pueda complementarse con otro tipo de accesorios, como el brazalete y los pendientes de la firma de joyería Rocío Porres. Pertenecen a su nueva colección. De hecho, prácticamente recién llegados del taller pasaron a mis manos para la sesión de fotos. Todo un honor tener la exclusividad de las piezas para exponerlas aquí, en Con Acento Artesano.
Si observas están elaboradas con pequeñas hojas, elemento protagonista de la firma en todas sus colecciones desde hace varias temporadas, pues, de hecho, se ha convertido en una particularidad característica de Rocío Porres junto a su logo: el girasol.
Para el estilismo, Verónica Carrión realizó un maquillaje tendencia de esta temporada otoño e invierno, en la que los ojos se marcan suaves y los labios ganan en intensidad, dejando de lado un poco esos ahumados para darles un protagonismo delicado en tonos nude, destacando los labios en frambuesa. El pelo se trabajó en ondas suaves y se recogió hacia un lado para una mayor presencia de los pendientes.
Bowling textil y étnico de Charo García
Para este bolso he intentado alejarme de una propuesta básica y fácil como son unos jeans con camisa blanca de botonadura y blazer negra. He jugado con los tonos y he añadido una camisa de lazada con puños abullonados en un tono gris azulado. En vez de vaqueros, pitillos en negro y en vez de blazer un abrigo, eso sí, de textil vaquero en tono claro con mangas tres cuartos y cuello caja con solapas.
Como accesorios para este look he contado con el reloj Girasol de Rocío Porres, que ha dado a conocer hace poco más de mes y tras algo más de un año de trabajo. Los primeros diseños lucen correas de piel en rojo, dorado, azul y negro, como es el caso para este reportaje. También de la firma, he combinado con pendientes girasoles de tamaño mediano, a juego con la pulsera que da la hora, y que están diseñadas en base al logo de la empresa.
Para esta ocasión, el socorrido peinado de cola alta y pelo liso se cambió por uno más divertido, a base de nudos y trenzas despeinadas agarradas por pequeñas horquillas. También Verónica Carrión suavizó la fuerza del maquillaje, cambiando el labial por uno más natural, aportándole brillo con purpurina sobre la zona de la piel que rodea a los ojos y sobre los párpados superiores.
Es el maquillaje que inundará esta temporada cualquier evento que se tercie, pues los ochenta han vuelto y no sólo lo han hecho en moda. Sin duda es perfecto para darte luminosidad estas fiestas. ¿O no te ves así para Navidad o Fin de Año?
Las gafas de sol que habéis podido ver en ambos estilismos son también de Charo García, realizadas en print animal con parte de la montura al aire. Las he combinado en ambos looks, pues este tipo de gafas suelen ser básicas de armario y van bien con casi todo.
Una vez más Charo García imagina una colección llena de multitud de posibilidades. Desde los tamaños más pequeños hasta los XXL. En concreto, el bolso shopping que he elegido esta temporada viene muy bien compartimentado en su interior, con varios bolsillos con cremalleras y sin ellas. Es el tipo de bolso que necesitas tapar con pañuelo lo que puedas llevar dentro, pues arriba sólo tiene un cierre tipo mosquetón para unir ambos lados, pero por su tamaño y diseño resulta muy útil para las distintas situaciones a lo largo de un mismo día.
El detalle de las monedas que cuelgan fuera me encanta. Además, su tono camel lo hace compatible con casi cualquier época del año, por lo que me atrevo a asegurar que su uso puede alargarse hasta comienzos de primavera.
El otro bolso, textil, étnico y en color azul marino con fondo blanco, es de un tamaño medio pero con buena anchura para disponer de espacio. Se trata de un bolso bowling, nombre que se le asigna por su semejanza con la bolsa usada para transportar bolos.
El detalle de las piezas laterales textiles colocadas en el interior que limitan la apertura de las cremalleras es perfecto, pues te da seguridad sobre que no perderás nada al abrirlo. Es este tipo de elementos los que distinguen a Charo García de otras marcas. Este bolso pertenece a su línea Buga Bags y es uno de mis favoritos de esta nueva colección. ¿Y el tuyo? ¿Cuál es?
Os dejo imagen del equipo que formamos por un día para realizar este reportaje. En ella, detrás y casi imperceptible, Rafael Arbide, fotógrafo de la sesión, Verónica Carrión con todo su equipo y yo misma. ¡¡Gracias, gracias, gracias!!
Imágenes para este post: Rafael Arbide
Estilista: Verónica Carrión
Bolsos y gafas de sol: Charo García
Brazalete, pendientes largos, pendientes girasol y reloj girasol: Rocío Porres
Falda étnica: Lago Rosa
Qué bolsos tan divinos…y tú muy guapa, me han encantado todos los looks…Saludos!!
Los bolsos de Charo García son verdaderos caprichos y muy combinables. Gracias por tus palabras Xiomy Lamadrid. Saludos!!