¿Cuántas novias románticas existen? Tantas como Taller de Diseño imagina. Su estilo de un romanticismo palpable sin encorsetar, de cariz etéreo, suave y delicado, se atiene al concepto romántico que cada novia posee, donde la simpleza de líneas se recargan con sutileza, siguiendo tendencias, a la par que hace guiños a la historia de la costura pero interpretándolos a su modo.
Sus novias 2015 se han paseado en la III Edición de Aires de Boda el pasado 11 de abril en el Alfonso XIII. Los desfiles se celebraron en el corredor que enmarca el patio interior del hotel, al que llegaba la luz natural que atravesaban los ventanales, aportando el punto de candidez que rodea a este tipo de pasarela. Firmas como Rosa Clará, Protocolo Novios, Sastrería Lista, Hatsbyroiz y Jesús Peiró presentaron sus propuestas de novio y novias junto a Taller de Diseño.
Vestidos de Fiesta de Taller de Diseño
El desfile se inició con uno de sus vestidos de fiesta que bien mirado es un dos en uno, pues viste un clásico LBD con otro sin mangas, escote uve y abertura lateral por donde deja ver el segundo vestido. Recordad que el negro hace un tiempo que ya es de nuevo invitado a bodas; curioso fenómeno éste paralelo que acompaña a las crisis económicas, pues la moda siempre es un reflejo de lo que sucede en la sociedad. Observad como el rojo también ha vuelto con fuerza, junto a pendientes, pulseras y anillos de gran tamaño que, a falta de oro, si pueden ser en un metal de ese tono, mejor que mejor. De hecho, para la noche, su vestido largo es en este tono, con el hombro cuajado de perlas textiles decorando desde un lado el escote drapeado del corte imperio.
Verde, amarillo y gris tiñen tres vestidos de cóctel, diferentes según seas de las que te gusta marcar tipito, que para eso has perdido esos kilos que te estorbaban, de las que te gusta insinuar, marcando caderas y talle, acabando en falda evasé, o de las que no se pierden las tendencias, optando por el doble largo donde por delante se ajusta a las rodillas y por detrás no llega a los tobillos, abriéndose el vuelo abotonado donde la prendq que viste es protagonista del cuerpo que lo lleva.
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Colección de novias de Taller de Diseño en Aires de Boda 2015
La colección de novias comenzaba con uno de los vestidos más bellos que nunca he visto, cuya dulzura en tonos, tejidos y confección daba ese aspecto hippie chic, pero muy chic, con glamour. Manguita francesa, vuelo ribeteado que se adapta al paso, detalle en cintura que marca caderas y pinceladas en los hombros de lo que se esconde detrás: una cola llena de hojas en oro mate que también enmarcaban el escote a la espalda.
Los tules de seda y crepés de satén pesante, ambos tejidos con caída dulce, ésa que se adapta marcando el talle en un modo suave y coqueto, son los preferidos por taller de diseño en sus creaciones, cuidando a la novia por delante y por detrás. Esas horas de iglesia donde, ya sea sentada o de pie, sólo se la ve de espaldas dejan de ser aburridas gracias a Ángela y Adela, que no escatiman en detalles como botonaduras, colas exornadas o aplicaciones de flores y perlas en la cintura.
Admiradoras de las puntadas Chanel, introducen su detalle bicromático, conocido por todas, con la ayuda de cinturón negro de lazada contrastando con el blanco nacarado, salpicado de guipur en la parte baja del vuelo, guardando cierto parecido con esos vestidos neoclásicos de ligera caída de fines del XIX y principios del XX.
Acostumbrada a ver vestidos de novia, topar con dos piezas lo hace no sólo original sino práctico por la versatilidad de uso posterior. Hay quien corta faldas y entalla y puede que, a pesar de hacerlo, nunca vuelva a ponérselo. Con Taller de Diseño es difícil que eso ocurra, pues la ventaja de sus dos piezas es la facilidad de uso del cuerpo, más que de la falda, por lo que puedes conservarlas ambas intactas y disfrutar de la camisa mientras quieras. Éste es de mangas ablusadas con puños abotonados, falda plisada y cinturón bordado de flores que resta rigor al atuendo y aporta frescura.
Tras él, un clásico de satén con encaje no puede faltar en una colección de novias, donde el tocado y el ramo son imprescindibles para aportar la nota de color y contraste.
El desfile finalizó con 3 vestidos de corte princesa, donde los tejidos brocados daban volumen y vuelo desde la cintura, ajustada por cinturón en tono verde, en consonancia con aplique de flores que recorría el espacio entre hombro y cuello, pasando por el escote.
Entre ambos desfiló de nuevo un vestido con toque romántico y hippie-chic de lujo, con ese aire de boda clásico a lo Gilda, donde el cinturón se torna imprescindible y necesario para marcar cintura del vuelo que abriga al vestido entallado y de la cola rematada con volante que nace en la cintura. Sorprendente la pamela en sinamay con movimiento propio y al unísono de los pasos al andar.
Cerró el desfile un dos piezas, de camisa en seda natural de punto casual, con fruncido formando jaretas en la empuñadura de la manga francesa y doble costura al hombro, que lo eleva y aporta ese toque de empaque a una sencilla camisa de novia, donde la unión entre ésta y la falda pasa por un cinturón ancho de flores diseminadas en piel troquelada.
Tocados para novias e invitadas a boda de Taller de Diseño
Todos y cada uno de los tocados que se han visto en esta colección han salido de las manos de Ángela y Adela, donde el entramado de alambre se decora con flores troqueladas, tules, terciopelos, piedras semipreciosas, granates, perlas y piel de ángel.
Una veces son un tocado en sí, otras una banda y otras una diadema estilo princesa, pudiendo intercambiar el mismo de novia a invitada con facilidad y constituyendo una buena alternativa al velo para novias.
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Se han diseñado en exclusiva para los cada traje que se ha presentado, por lo que armonizan perfectamente con cada novia que se crea en Taller de Diseño, estableciendo el equilibrio adecuado sin restar importancia a nada de lo que sus novias ese día luzcan.
