Empezamos un nuevo año para Gran Soho Alameda, en particular, y para todos, en general, pero con la también nueva rutina que requiere mascarillas, hidrogel y distancia, esa que te quita los abrazos y besos con todo aquel que no sea tu conviviente.
Así se desarrollaba un mes más de enero en Gran Soho Alameda, con las características, eso sí, de siempre en una fecha tan fría como ésta, por lo que abrigos y prendas de manga larga no faltaban entre los stands de Oliver, Clohe, Romasol, Toma II, Crazy y Amelia, destacando aquellos en los que abundan camisetas con mensaje, ésas tan de moda en los 80 que han vuelto al nuevo siglo, topando con unisex en Capitán Mauro y Camijetas.

Para completar el look siempre presentes firmas de pequeñas joyitas, otra tendencia, por cierto, tomada de la década de las hombreras, como son, Yucca, A mi manera, Pau Pau, Creando Flores, La idea de Eva, Kiwi y Rosa Zacane. Junto a otras con algo más de presencia y protagonismo en los estilismos como son los colgantes de naturaleza encapsulada y enmarcada en madera de La Sueka, los maxi collares de Complementos Luz, los pendientes de plumas coloreadas de Mia Plumitas, la deliciosa joyería de Mayabai y las libélulas trenzadas a mano de Guillermo Ron Vaz.

En cuanto a otro tipo de complementos, pudieron verse los bolsos de papel reciclado de Manuel Campos, las diademas de tela de Por la Patilla y las mascarillas de tela de Edumer Flamenca.

En lo que respecta a los peques, para moda infantil había que recalar en La i, en juguetes había que hacerlo en Denki y en Lamaricosi, como de costumbre, y para papelería coqueta en Taller Elfos, a la que también se podía añadir las libretas ilustradas de Sara Gabande y las tazas decoradas de Karen´s Suitcase. Sin olvidarnos de los simpáticos herméticos.

Para la casa, las velas de Diana Vega no dejan de sorprenderme, al igual que las casitas de duendes en cerámica de Ana de Mesa y que pueden acompañarse de los inciensos de Dani.
Por último, la asociación Fundación Benjamín Menhert, por un lado, y ÁPICE, por otro lado, a cuyo beneficio se celebra este mercadillo al aire libre el segundo domingo de cada mes, también disponían de su espacio, como es habitual.