Tras un lapsus de esos que sí, que no, que te dejan un poco a la expectativa de lo que sucederá, en el último domingo del mes, que no el segundo como tocaba, se ha celebrado una edición más del Gran Soho Alameda. Debía ser otro domingo y no éste, pues así lo marcaba el cambio que se hizo hace un tiempo, pero se ve que parece que le va a costar moverse de día. Ha sido la climatología responsable del vaivén de fechas, ya que una alerta amarilla por lluvias, esa que por poco nos hace salir de casa en barca, se ha encargado que el soho de este mes se ubicara de nuevo en su anterior domingo de siempre.
Como invitado especial el calorcito que siempre viene demasiado pronto, para mi gusto, y que se paseó entre los stands, el cual ha sido responsable que sea éste el primero del verano, pues aquí la primavera dura lo que dura y las temperaturas ya apuntan hacia la siguiente estación.
La manguita larga y corta, gasas, algodones, encajes y demás, para vestidos, blusas, camisetas, polos y todo aquello con lo que desees toparte en ropa, tanto tú como él, te lo encuentras en Gran Soho Alameda en Romasol, Pil Glob, Clohe, MC, Mestizzo, Patricia García, Macarena Hinojosa, Vainilla, Bambola, Oliver, Songes, Desseo, L’ami D’un Ami, Carmen Arteaga, La mar de Cuqui, La Alcalareña y Arréglate Caballero.
Y para los peques no olvides bañadores como los de Koala además de ropita en divertidos estampados de verano de El duende de la tienda y Retoño, sonajeros tricotados Oh Mami, las bandas para el pelo de Tui Tui, los zapatitos tricotados de La Tararababy o las batitas de Teresilla.
En complementos si buscas que sean de materiales poco vistos las visitas debes dosificarlas y repartirlas entre Corksyle, para ver sus bolsos y pulseras de corcho, Keramikos con sus colgantes de cerámica, los pendientes de florecillas de Creando con flores y los brazaletes, sombreros y carteras de papel de periódico de Manuel Campos. Embobada con los sombreros de rafia de Aurora Cottan, combinables al cien por cien con los collares de La hoja azul, los pequeños pendientes de Maipo y las alpargatas de esparto de La costurería.
Pero como no hay mercadillo sin los clásicos complementos en piel Delsay no faltaba con su pulseras con abalorios. Otros complementos no tan clásicos, de ésos poco vistos que bien podrían agruparse en el párrafo anterior, son los pendientes de plumas de Mia Plumitas, los pañuelos de seda pintada a mano de Concha Barón, los colgantes de orgonitas de Julia Álvarez y los collares de esmalte sobre metal de Teresa Yuste, que se codeaban con la bisutería de El desván de Licaria, Esperanza Orzaez, Lola Abanicarte, MLuz, Briguitte Montero, Q’Monas, Creaciones Antakaran, Iranza, Tirititran, Maipo y los tocados de Retocados, tanto para novias como para invitadas, dejando espacio a las pulseras rígidas y gargantillas de Zarandajas.
En bolsitos textiles de nuevo Contodoelarte, Hey Virita Hey y MJVariant7, junto al exotismo de la piel con tachuelas de Reda Hafidi o la singularidad en pajaritas de madera de La era Pez, esos contrastes que tanto gusta encontrar cuando sales a buscar tesoros.
Para la mesa de comedor, para decorarla y disfrutar de un almuerzo, comida y demás, los útiles necesarios se diseminaban por el soho. Casi al principio, manteles de esos que repelen manchas de Manteles Chic en diferentes estampados sobre los que reposar el menaje de Farándula en la mesa, en la que sería una agradable compañía alguien de la talla de Frida Khalo, pero tendremos que conformarnos con tenerla en forma de taza, de esas de las que ilustra Ciervantes, de la que tomar los sorbos del café e imaginar conversaciones mientras damos bocados a taquitos de Quesos El Majadal, bocaditos dulces de pasteles libaneses llamados baklavas elaborados por Samer o cupcakes rojos con dulce de leche de Dulces el Cedro, acompañados de tragos de vino de miel de Colmenas del Sur, mientras pensamos si abrir o no el tarro de mermelada del Obrador Valle de la Osa, que con lo que decora da pena abrirlo. Y si no, mejor mirar las casitas de barro para decorar paredes de Tetera de Madera. Eso sí, ¿te has lavado las manos antes de sentarte a la mesa? ¿No? Pues corre al lavabo que da gusto ese aroma que deja en la piel los jabones de Las manitas de Lola. Y todo a la luz de cualquier lámpara de Fabrikería.
Te aconsejo dar un segundo paseo antes de irte, para repasar, que seguro que algo se te ha olvidado, o, simplemente, para no abandonar el Gran Soho Alameda sin el capricho para el peque, ya sean de los personajes de Loli Fieltro o de las chapas de Entropía. Si te acompaña, haz uso de la paciencia cuando llegues a los juguetes ecológicos de Denky o los juegos de mesa de Lamaricosi, se embobarán, sobre todo cuando paséis delante de los cuadernos y cajas de El Taller de Elfos o las de Iberico Southern.
Eso sí, recuerda que, cada mes, este mercadillo al aire libre ayuda a APICE (Asociación Andaluza de Epilepsia) a mejorar la calidad de vida de quienes padecen esta enfermedad. De los talleres que organizan salen bandejas de madera como las que ves aquí. Tu paseo por el Gran Soho Alameda ayuda a otros.
¡¡¡No olvides que el próximo Gran Soho Alameda será el segundo domingo de Junio!!! Este será el último, descansando Julio y Agosto para volver en septiembre. ¿Te lo vas a perder?