Lo bueno de una presentación de finalistas a concurso es que sirve de escaparate, lo mejor es que hace que el listón suba. Y es que un buen puñado de sorpresas me he llevado en la primera jornada de We Love Flamenco 2015, donde las nueve promesas de la aguja flamenca que competían en la segunda edición del Concurso de Nóveles han mejorado sus propuestas iniciales, todos, sin excepción. Por tanto buen nivel y competitividad entre los participantes, aunque he echado de menos la existencia de una mención especial por parte del jurado.
José Peinado abría el desfile del concurso y apuntaba la senda que todos han seguido: mejorar sus propuestas. Los dos vestidos que ya conocía cumplieron, en su momento, a la perfección su cometido: ocultar el resto. Son una de las sorpresas que me he llevado.
Cada vestido era mejor al anterior. La combinación de rojo con platas y oros, los escotes a la espalda que lo son sin serlo y el vuelo abullonado de la falda rematada con volantes, son los detalles que eran imposible adivinar por los clásicos canasteros que presentó en noviembre. La bata de cola en rojo de escote palabra de honor simplemente es espectacular.
Otra sorpresa ha sido la de Diana López pues, sin duda, viendo sus vestidos de flamenca de noviembre era imposible imaginarme que acabaría su desfile en enero con unos trajes como los que os muestro, donde la seda, la dulzura y el movimiento del tejido hace honor al nombre de la colección: “Cómo ha cambiado el cuento”.
Uno de mis favoritos, Ángel Corrales, presentó una colección en la línea que ya dibujara allá en noviembre, donde los metros de tela, bordados y volantes con movimiento hablan de flamenco, de “Aroma Andaluz”. Ten cuidado Ángela Campos, te ha salido un serio competidor en enmarcar espaldas y si no mira tú misma la foto donde el bordado recortado acaricia, bordeando la espalda al descubierto hasta algo más que la cintura. Cerró con una metreada bata de cola bordada a mano en blanco sobre negro.
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María Amador añadió a su colección “Volver” el tono verde, al contraste con el orquídea radiante de su avance en noviembre. Mi favorito es este vestido amazona que te ofrece la alternativa de montar a caballo igualmente en la Feria pero con un toque de lujo y coquetería sevillana, sin olvidarme de este otro, cortito, de enaguas fresas y mangas bolero a lo Ángeles Verano.
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Leticia Domínguez trajo a la pasarela un “Mar de volantes” enroscados al hilo y otros en forma de pétalos, consiguiendo sugerirte, sin necesidad de saber el nombre de su colección, las ondulaciones marinas y sus habitantes nadadores, respectivamente.
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Confieso que la colección de Didí Martí era, para mí, una de las más esperadas. Ya en la presentación de los finalistas para el Concurso Nóveles en We Love Flamenco en noviembre del año pasado, su femenina falda abullonada en negro contrastado con la minúscula “camisa” del dos piezas prometía que se desmarcaría del resto, pero sin olvidar los cánones flamencos. Ese “Agüita de mayo” que tanto estorba cuando vas a la Feria ha sido inspiración para ella, aportando una ingeniosa solución para uno de los inconvenientes del paseo feriante. ¡¡Gracias Didí!! Ha conseguido transformar el mantoncillo en una gabardina transparente, flecada y floreada, funcional y decorativa. Abría fuerte, a lo Ágatha Ruiz de la Prada, y cerraba dulce con faldas clavel, cuajadas de volantes en movimiento, para las flamencas menos osadas.
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Las propuestas para el lunes del pescaíto venían de la mano de Elena Lisbona. Los lunares aterciopelados del pantalón al contraste con el plumeti básico en blanco, consiguen la “Esencia flamenca” añorada para este día.
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Y llegaron Esther Cabello y Ana Rodríguez, entre mis preferidas para el premio, o lo que es lo mismo, la perfección mejorada por la coquetería sevillana. Otra sorpresa más, aunque esperada, de la mañana del miércoles. Ya me anunciaron en noviembre que, lo mejor, lo reservaban para la final del concurso y, desde luego, así ha sido.
El brillo de tejidos se potenciaba con glitter o lentejuelas, coloreando un lujo dulce, como el de éste en tono orquídea radiante rematado abajo con enaguas a la vista y arriba con peina recortada de Artepeinas, quien este año marcará tendencias y se dejará ver en algún que otro desfile más a lo largo de esta semana. Contrastando con el lujo del comienzo continuaron con trajes de flamenca a lo vintage, que para eso su colección se llama “Nostalgias”, de elegantes estampados en flores sobre tonos pastel, y acabando el desfile con ese lujo sevillano que dominan, aportando plumas en el escote. ¡¡Gracias por crear tan bonito!!
El concurso finalizó con el desfile de quien sería la ganadora y que ya cuenta en su haber con otro reconocimiento a su confección por parte del salón de moda flamenca de Jerez. Este último galardón, el de ayer, no hace más que confirmar su buen diseño y patronaje. Inma Linares estaba entre mis favoritos pues enamorada quedé del dos piezas que presentó en noviembre, de la falda con ese volante que envolvía la silueta de la modelo hasta alcanzar la cintura y que se dejaba acariciar por la camisa de escote floreado en uve a la espalda.
Se hizo esperar hasta el final el poder contemplar su colección, como todo lo bueno, y no defraudó. El cuerpo sin mangas cuajado de flores, la blusa plisada en azul eléctrico, la gris de capa con flores al hombro, pero, ¿son las camisas nada más? Mires lo que mires de Inma Linares te va a gustar, tiene el don de crear y mejorar en cada puntada. Inma, consigues que se quieran ver más diseños tuyos, más colecciones y no sólo en flamenca.
¡¡Enhorabuena Inma Linares, ganadora Concurso Noveles We Love Flamenco 2015!!
